Reza el Rosario!
Pray Rosary Novena from www.EWTN.comSong - Con El Rosario en Mi Mano
Hazlo parte de tu oración diaria y tu vida nunca volverá a ser la misma.
J.M.J.
Por Arlene y Marta
El rosario es una forma tradicionalmente católica de orar que puede ser definida como una meditación espiritual. Rezando Padre Nuestros y Ave Marías, nos concentramos en los misterios de la vida de nuestro Señor Jesucristo y la Virgen María, y con la sabiduría que esto imparte al alma, aumentan nuestras virtudes y el amor a Dios.
Tradicionalmente se atribuye el rosario a Santo Domingo, un sacerdote español del siglo trece. La Virgen María se le apareció llevando un rosario en las manos. Ella le dijo que la santa devoción al rosario ayudaría a convertir a muchos y obtendría grandes gracias del Señor.
Santo Domingo, el fundador de la Orden de los Dominicos, enseñó a la gente como rezar el rosario, y más de cien mil se convirtieron. Siete siglos después en 1917, la Santa Virgen reitera la necesidad de rezar el rosario, al decirle a los niños en su aparición en Fátima:
"Yo soy la Señora del Rosario. He venido a advertir a los fieles que enmienden sus vidas, y que tienen que pedir perdón por sus pecados. No deben continuar ofendiendo a nuestro Señor, quien ya está sumamente ofendido. Recen el rosario."
En este mundo en que vivimos, en medio de una tempestad de tentaciones, la paz que el rosario puede otorgar está a nuestra disposición. El Papa Juan Pablo II grabó un cassette, y un disco compacto del rosario, el cual se ha hecho muy popular en el mundo secular. Aquí en la ciudad de Sugar Land, Texas, el Padre Roy Oggero escribe:
"Les quiero sugerir que recen el rosario diariamente. Es la Oración de la Paz. Al hacerlo lograrán rechazar ira, envidia, amargura, rencor, miedo, ansiedad, y lo opuesto de estos sentimientos empezará a reemplazarlos.
El Padre Albert Shaman, un sacerdote de Rochester, en la diócesis de Nueva York cuenta una historia de la gran cruzada del rosario en Austria, la cual liberó ese país del dominio soviético:
Al final de la Segunda Guerra Mundial, los aliados victoriosos se marcharon de Austria y la dejaron bajo el dominio soviético. Después de tres años de tiranía el pueblo austríaco no podía soportar más el control de los comunistas. El Padre Peurus recordó cómo los Turcos de Ottoman fueron derrotados en Lepanto en 1591; aunque los cristianos se encontraban en minoría, ya que por cada uno de ellos había tres turcos. El rosario fué rezado por todos sus habitantes y los turcos fueron derrotados. Así es que el Padre Peurus convocó al pueblo a que se uniera en una Cruzada para rezar el Rosario en contra de las tropas de ocupación soviética. Él pidió que el diez por ciento de la población o sea 700,000 austriacos rezaran el rosario diariamente. Logró que todos ellos rezaran durante siete años el rosario todos los días. Por fin, en mayo trece de 1955, en el aniversario de la aparición de la Virgen María en Fátima, los rusos se retiraron de Austria. Esa evacuación no ha tenido explicación alguna debido a que Austria de acuerdo a los historiadores, representaba un verdadero premio mayor para los rusos después de la segunda guerra mundial."(1)
El Padre Roy Oggero(1) cuenta ese episodio con el objeto de demostrar el poder de la oración, especialmente el rosario. Agrega que la decisión de usar ese poder es nuestra. Dice que reza para que todos nosotros digamos que "Sí!" al Espíritu Santo más a menudo, y recemos el rosario.
Nosotros necesitamos una cruzada de rosarios en cada una de nuestras familias, para derrotar y ahuyentar el poder que el mal tiene sobre nuestras vidas, y la de nuestros hijos. El rosario ha ayudado a muchas personas, al tornar sus almas al Señor en oración; ayudándolas en la resolución de situaciones que parecían imposibles de sobrellevar, como se puede ver en la siguiente historia del libro, A Missionarys Notebook. (2)
Había estado en el confesionario toda la noche. Faltaban quince minutos para la media noche, e iba subiendo las escaleras para mi cuarto, cuando el timbre de la puerta sonó. Fuí a la puerta.
"¿ Quién es?" - Pregunté.
"Un hombre que quiere ver a un sacerdote."
"Pero ésta no es hora de ver a un padre. ¿ Hay alquien enfermo?
"Sí, padre," fué la respuesta de una voz muy triste. "Yo estoy peor que enfermo."
Abrí la puerta, y me ví enfrente del que hablaba, un hombre harapiento.
"Padre, ¿quiere usted salvar un alma?"
Entró como si fuera de la casa, sin esperar a ser invitado. Usualmente tal procedimiento me hubiera alarmado, pero en ese momento no sentí miedo alguno. Con la luz tenue del pasillo, lo pude ver detalladamente. Al quitarse la gorra, logré ver una tez blanca y ojerosa, el cabello despeinado, un abrigo harapiento y unas manos mugrosas. Los ojos eran claros y lucían ansiosos Yo simplemente esperé a ver lo que él tenía que decir.
"Padre, soy un ladrón y pertenezco a una banda de bandoleros. No, no tenga miedo. Antes era un buen católico, pero no he practicado mi religión desde hace años. Esta noche asalté a un obrero, el cual acaba de recibir su paga. Lo agaré por el cuello, y tomé de su bolsillo un rollo de billetes, enredado entre ellos había un rosario. Cuando ví esas cuentas, sentí un tremendo escalofrío. De repente ví delante de mí, la cara de mi madre. Como una centella, le tiré el dinero en las manos al hombre, gritando: ¡ Lárgate! ¡ Yo me quedo con ésto! Antes de que él pudiera gritar, corrí, volando, a través del callejón a esconderme, para sentarme y mirar el rosario."
"Me parecío ver nuestra casita en el campo, y a mi vieja madre (Que en paz descanse.) sentada en su silla en el portal con las cuentas del rosario en el regazo. El sol alumbraba, y los animales en la granja, hacían sus ruidos rutinarios, pero mamá me miraba a mí. Que quieres, mamá? Nada, hijo, solamente que seas un buen hombre. Yo estoy rezando el rosario por tí. Padre ohí su voz tan claramente como estoy escuchando la mía, y me desbastó. Resolví que iba a cambiar y a convertirme en un hombre honesto e ir a ver a un sacerdote esta misma noche. No creía encontrar sacerdote alguno a estas horas, pero creo que Dios se apiadó de mí cuando Él lo envío a usted."
"Hijo,"- dije.- "¿ quieres confesarte?"
"Eso es lo que me trajo aquí, padre."
Entramos en un pequeño cuarto donde tenía una estola y una rejilla, y él se arrodillo e hizo su confesión. Fué una escena realmente extraña. El cuarto en penumbra, con solamente la lámpara que alumbraba timidamente desde afuera, con la casa totalmente en silencio, y el majestuoso sonido del campanario anunciando la media noche. En medio de todo, la labor de Dios se logró, y cuando nos hallamos parados en la puerta, él me dijo:
"Padre, usted puede confiar en mí. No tengo un centavo en este mundo. Le devolveré la plata que usted me preste, el próximo sábado."
Puse mi mano en el bolsillo. Solamente tenía un billete de dos dólares.
"Lo siento," - Le dije.- "No tengo nada más."
"Es suficiente, padre. Trataré de encontrar trabajo, y mientras tanto esto me alcanzará para la comida y el alojamiento que necesito. Regresaré el próximo sábado. Buenas noches."
"Que Dios te bendiga, hijo,"- Le dije.- "Buenas noches." Y cerré la puerta.
Me tomó un largo rato el poder dormir. La cara de ese pobre hombre la tenía delante de mí. El pequeño rosario blanco, y la imagen vívida de su vieja madre en esa silla, en el portal, tal parecía que me seguían, aún cuando soñaba
"Oh, benditas madrecitas que rezan por sus hijos descarriados, nunca se dEn por vencidas. Dios no ignora sus oraciones. Ellos regresarán, y habrá felicidad en el cielo por el pecador que regresa, por esa oveja que estaba perdida y fue hallada por sus oraciones llenas de amor."
No necesito decirles que el muchacho regresó el sábado siguiente y ha seguido viniendo desde entonces, llevando una vida digna de un hombre bueno y honesto.
El rosario para mí es como la línea umbilical de gracia que conecta mi ruta terrestre con mi familia eterna y eterna morada. Piensa por un minuto La línea umbilical conecta al bebé en la matriz de su madre, con su mamá, y es la vía a través de la cual el bebé puede obtener su nutrición Cuando yo rezo el rosario, una línea de nutrición espiritual se abre proporcionándome inspiración divina, sabiduría, consuelo y perpectiva para dirigirme y guiarme hasta que me vaya a mi mansión celestial.
Mi devoción por el rosario se originó en mi niñez. Fué inculcado por mi familia, la cual rezaba el rosario por la noche en la casa, de rodillas, todos juntos. No recuerdo que fuera totalmente espiritual. Algunas cosas cómicas pasaban con mamá y papá tratando de que nos portáramos bien para poder terminar de rezarlo. A pesar de eso, el rosario dejó una gran impresión en mi vida. Me eduqué en una escuela católica, donde también lo rezábamos. En mi pequeño pueblo, el rezar el rosario era parte de la mayoría de las devociones litúrgicas.
Cuando crecí y me mudé a la ciudad, de repente me encontré enfrentada a diferentes opiniones y doctrinas, las cuales me causaron confusión y malos entendimientos. Hasta a veces encontré personas que se burlaban de mi fé católica. Creo firmemente que algunas de esas situaciones fueron causadas por cristianos sinceros, que creían en la biblia y pensaban que estaban haciendo el bien. Comenzé a sentirme intimidada e incómoda. Como resultado, dejé de rezar el rosario y no hacía la señal de la cruz fuera de la iglesia a no ser que fuera en una crisis ocasional. Aquellos individuos, fuera de la iglesia, sonaban como que sabían lo que estaban diciendo, y me impresionaban con su conocimiento de la biblia, así que yo pensaba que ellos sabían de lo que estaban hablando. Comenzé a rezar al Señor para que me demostrara la verdad, y fervientemente empezé a estudiar las escrituras bíblicas y las enseñanzas de mi fe católica.
Fué después de asistir al Seminario de "Vida en el Espíritu," donde yo proclamé a Jesús, Amo y Señor de mi vida, cuando el Señor Jesucristo me entregó de nuevo a su madre y el gran regalo que el rosario representa. Desde entonces he estado rezándolo. Para mí el rosario es el recurso más poderoso de la oración de intercesión, junto con el Santo Sacrificio de la Misa. Es el cordón bíblico de gracia que me mantiene conectada a la iglesia y a los sacramentos que nuestro Señor estableció. El camino que he recorrido ha sido largo, pero hoy soy católica porque he probado y he visto la verdad de nuestra fe al rezar y estudiar. He visto claramente que la devoción a la Virgen María y al rosario siempre lleva a Jesús, especialmente a la mesa de la sagrada eucaristía. Hoy, creo que hay razones que respaldan la conciencia y enseñanza colectiva de nuestros padres apostólicos en la iglesia, las cuales se pueden explicar históricamente, a través de nuestras tradiciones y con la ayuda de la biblia. Hay razones válidas para la enseñanza y la práctica de nuestra fe católica. (3)
Cuando miro mi rosario, lo primero que veo es el crucifijo, recordándome el mensaje total de la salvación, por obra y gracia de nuestro Señor. Reflexionando y meditando en la vida de Jesús, su muerte y resurrección, mientras uno reza el rosario, es como mentalmente leer y visualizar las sagradas escrituras. Para mí es como mantener un diario que me ayuda a no olvidar las citas con Dios en oración. Me ayuda a establecer prioridades en oración, y me ayuda a recordar mis intenciones especificamente. El rosario es oracion centralizada. Con él en mi mano me mantengo enfocada en la oración y me protege de las distracciones que de otra manera estarían ocupando mi mente. El rosario me ayuda a obedecer el mandamiento de Dios a "rezar sin cesar." Me ayuda a evitar pensamientos de celos, resentimiento, amargura y me ayuda a perdonar. Es una gran ayuda para mantener mi corazón limpio. El enemigo odia el rosario y trata de evitar que uno lo rece. Una vez un amigo de mi familia llegó a mi casa y le pidió reiteradamente a mi esposo que me ordenara dejar de rezar el rosario. ¡ Qué poderosa oración debe ser el rosario!
Yo puedo reflexionar, planear y organizar mi día mientras rezo el rosario. Solamente toma de quince a veinte minutos. Lo puedo rezar mientras conduzco el carro o mientras estoy haciendo mis ejercicios. Lo puedo rezar con un casete mientras trabajo. Lo puedo rezar en voz alta o silenciosamente. Lo puedo rezar en acción de gracias, alabanza o en petición. Lo puedo rezar cuando estoy deprimida, o cuando me siento que el mundo es de color de rosa. Lo puedo cantar o lo puedo recitar. Yo puedo abrir mi alma al Señor mientras rezo el rosario, o puedo hacerlo de pasada sin pensar. Es un instrumento que la santa Virgen María nos enseñó. Lo que yo obtengo al rezarlo depende de mi actitud al hacerlo. Las gracias que recibimos al rezarlo NO depende de como nos sentimos, de nuestro conocimiento o de nuestro entendimiento del rosario. Es un regalo de Dios. Puedes ser un doctor, un campesino, un sacerdote, una monja, el Papa, un niño, y TÚ puedes rezar el rosario. Puedes ser un católico o un protestante y rezar el rosario. Dios no limita sus gracias. Puedes ser un ladrón, un asesino, un adúltero y empezar a rezar el rosario con un corazón sincero y arrepentido, y las gracias de Dios no te abandonarán. No hay reglas a seguir sino solamente guías a seguir. Tú puedes personalizarlo al rezar el Ave María: " Santa María, Madre de Dios reza y ayuda a ----------ahora y en la hora de su muerte. Amen." Puedes rezar el rosario silenciosamente mientras acompañas a tu familia, mientras miran la televisión o una película. Esa es una excelente oportunidad para rezar por los programas de la radio y la televisión y al mismo tiempo compartir el momento con la familia.
Te sugiero que reces por lo menos tres rosarios de cinco décadas al día. Si estás casado/a reza el primer rosario por tí. Debes disponer de las gracias de Dios primero. Por la misma razón por la cual la aeromoza explica que hacer, en caso de despresurización de la cabina del avión: "La máscara de oxígeno caerá delante de usted deben aplicarse primero la máscara ustedes, y luego atender al bebé en su regazo" En la vida, las "presiones", las podemos llamar preocupaciones o tensiones, están constantemente cambiando. No nos es posible ayudar a nuestros seres queridos si nos encontramos privados del "oxígeno" espiritual que es la oración, así que reza un rosario por tí, primero y el segundo por tu cónyuge. Al rezar un rosario por tu esposo/a, te librarás y sanarás de resentimientos, amarguras y obtendrás la habilidad de perdonar, al igual que tu esposa/o. Al oir Dios tu oración, te dará gracias para encarar el día. El tercer rosario rezalo por tus hijos. En qué nos beneficiaría, obtener el mundo si perdemos a nuestros hijos espiritualmente, emocionalmente o físicamente? La epístola primera de Pedro, capítulo cinco, versículo ocho dice: "El demonio está rondando como león rugiendo buscando a alguien a quien devorar." Nuestros hijos necesitan nuestras oraciones para su protección, guía, y liberación de las tentaciones de este mundo. Si tú eres un adolescente o estás soltero/a, reza el primer rosario por tí, el segundo por tu familia, y el tercero por tu vocación en esta vida. Trata de hacerlo por seis semanas y verás los milagros que pueden ocurrir. Hay innumerables milagros que podemos obtener a través de la intercesión de nuestra madre celestial, la Virgen María. Quizás piensas que es demasiado el rezar tres rosarios diarios, pero Daniel en el antiguo testamento rezaba tres veces al día. Creo firmemente que lo que necesitan las familias de hoy es el rezar más. Pasamos muchísimo tiempo entreteniéndonos y no pasamos suficiente tiempo de rodillas con los ojos y la mente dirigida al cielo. Nos ocupamos saliendo a comer, yendo al cine o alquilando videos, jugando juegos electrónicos o haciendo deportes, leyendo libros, o simplemente sentándonos a ver televisión dejando pasar el tiempo. Podemos reservar unos minutos para rezar el rosario si eso se convierte en una prioridad en nuestras vidas. Hay tiempo para todo. No es demasiado pedir a nuestros niños que recen el rosario. Nuestra Señora, la Virgen María, se apareció principalmente a niños, y les pidió que rezaran muchos rosarios. Creo que es demasiado pedirle a nuestros hijos que recen el rosario, si nosotros no lo hacemos. Que Dios nos conceda el regalo de poder orar. Recemos el rosario!
Nosotros somos capaces de hacer grandes cosas. Si no podemos dedicarle al Señor una hora diaria en oración, ¿ cómo vamos a ser capaces de ofrecer nuestras vidas por Él?
Mejor un rápido rosario que ninguno. Lo comparo al corre-corre de la mañana en mi casa: Mi esposo y mis hijos salen corriendo por la puerta todas las mañanas, y yo me quedo más satisfecha con un beso fugaz, que sin despedida alguna. Similarmente la gracia de un rosario hecho rápidamente me inspirará a rezar uno más reflexivamente después.
No esperes al fin del día para rezarlo. No es la responsabilidad de tu ángel guardián terminarlo en tu lugar, después que te quedes dormido. Rézalo temprano en la mañana.
Si quieres probar el poder de la oración, te recomiendo que te apliques a rezar la novena del rosario por Charles V. Lacy (4) por algunas intenciones específicas. Esta novena consiste en rezar veintisiete días en petición y veintisiete días en acción de gracias, conjuntamente con las meditaciones en cada década. Es una de las novenas más poderosas que puedes rezar. Matt 7:7-8 nos dice: "Pidan y se les dará; busquen y hallarán; llamen y se les abrirá la puerta. Porque el que pide, recibe; el que busca, encuentra; y se abrirá la puerta al que llama."(5)
Nosotros nos encontramos en constante guerra espiritual: La sagrada escritura en Efesios 6:12 dice: "Pues no nos estamos enfrentando a fuerzas humanas, sino a los poderes y autoridades que dirigen este mundo y sus fuerzas oscuras, los espíritus y fuerzas malas del mundo de arriba."(5) Apocalipsis 12:17 dice: "Entonces el dragón se enfureció contra la mujer y se fué a hacer la guerra al resto de sus hijos, es decir a los que observan los mandamientos de Dios y guardan el mensaje de Jesús."(5) Nadie debe ir a una batalla sin un plan de acción. Orar requiere disciplina y dedicación, tal como un soldado en batalla. Jesús no nos abandonó. Él nos proporciona todo lo que necesitamos para ganar la batalla. Él nos ha concedido, al Papa, a quien Él le delegó la autoridad y voz en la tierra, al decir: "El que te oye a tí, me oye a Mí." Así que debemos obedecer y escuchar cuidadosamente a las enseñanzas de la iglesia. Él nos ha dado su propio ser en la divina presencia en la Eucaristía, y nos ha proporcionado la Sagrada Escritura para que nos de vida. Él nos ha dado los sacramentos, los sacramentales, y diversas oraciones para que nos mantengamos conectados a la fuente de gracia divina. Él en su gran amor nos ha dado a su Madre, y la comunión de los santos para que intercedan por nosotros y nos asistan en nuestra labor en esta tierra, específicamente San Miguel, el Arcángel, para que nos ayude. Cuando veas los milagros a través de la oración, querrás rezar el rosario más y más. Ponlo a prueba!
Para mí, el rosario es la línea umbilical de gracias, que destroza la cabeza de la serpiente. Obtén varios rosarios y pídele al sacerdote que te los bendiga. Entonces si se rompe uno tendrás otro. No sucumbas a la tentación de dejar de rezar el rosario.
Cuando te encuentres herido profundamente por otros, sometido a desdenes, traiciones, persecuciones o abusos, puede ser muy difícil el rezar. En ese momento es cuando necesitas ejercer tu fuerza de voluntad sobre tus emociones. Determínate a perseverar en rezar el rosario, especialmente por los que te han ofendido. Si aún encuentras difícil el rezar, consigue un casete del rosario y reza con él, hasta que el período difícil pase. Si la condición persiste, encuentra a un amigo que rece por tí, si es posible contigo. Ve a confesarte, y si es necesario recibe el sacramento de la unción de los enfermos. Probablemente tu condición es el resultado de una herida emocional profunda, causada por el rencor, resentimiento o la inhabilidad de poder perdonar a aquellos que te han causado tal sufrimiento, o el resentimiento en contra de la voluntad de Dios. Tal estado de ánimo puede interferir con tu habilidad espiritual de escuchar, discernir y obedecer a la voluntad de Dios. Es posible que si esa condición persiste, que cause extrañamiento con el que te ha ofendido, y tu alejamiento de la iglesia. Ten cuidado! Cuida tu corazón y guárdalo en contra de esos sentimientos, con todo tu poder de raciocinio. No dejes que esas emociones negativas te nublen la razón y bloqueen tu habilidad de amar. Recuerda lo que dice la santa escritura en Romanos 12:14: "Bendigan a quienes los persigan; bendigan y no maldigan." (5) Para mí es una situación de vida o muerte espiritual.
"En cualquier competencia los atletas se someten a una preparación muy rigurosa, y todo para lograr una corona que se marchita, mientras que la nuestra nos se marchita." 1 Corintios 9:25. ¡ Obtén el premio mayor! ¡ Reza el rosario!
Arlene
¿ Por qué rezo el rosario?
Rezo el rosario para encontrar la paz. Esa paz que solo Dios puede proporcionarnos. Al rezar el rosario, le traigo a nuestro Señor Jesucristo, todos mis pesares y muy calladamente escucho lo que Él me dice. Él, el autor de todo lo que existe dice: "Pide y te daré. Busca y encontrarás. Toca a la puerta y se abrirá." Yo siento en mi alma una paz celestial cuando rezo el rosario, al pensar en la grandeza de Dios y su amor por mí que nada soy. Mientras más rezo, más quiero rezar.
Marta
(1) Message to the Fourth Degree Knights of Columbus in Bishop John L. Morkovsky Assembly - August 1995. Printed with permission.
(2) A Missionarys Notebook, Rev. Richard W. Alexander, New York : P.J. Kenedy & Sons, 1908, pp 122-125
(3) Order Scott Hahns audio or video on Answering Common Objections Against the Catholic Church. St Joseph Publications 1-800-526-2151
(4) Lacy, Charles V., Rosary Novenas to Our Lady. U.S.A.: Benziger Brothers, Inc., 1954
(5) La Biblia, Editorial Verbo Divino, Navarra, España, Edición Revisada, 1995 © 1992
Carta Apostolica sobre el Santo Rosario
Research Resources Contents New Items Prayerline E-mail Search
Leap of Faith Catholic Site © 1996-2013